Monika Buch
Monika Buch, la única mujer española que estudió en la HfG de Ulm (escuela que reincorpora tras la guerra el legado de la Bauhaus), nace en Valencia en 1936, de padres alemanes. Su infancia transcurre entre Alemania y España, donde su familia se desplaza para evitar la Guerra Civil y la segunda Guerra Mundial respectivamente.
En 1955, después de finalizar sus estudios en el Colegio Alemán de Barcelona, su madre le presenta un recorte de prensa con un artículo de “Die Zeit” sobre la inauguración del nuevo edificio de Max Bill para la Hochschule für Gestaltung (HfG) en la ciudad alemana de Ulm.
En la HfG se propone un estudio de la percepción visual abstracta, no objetiva, interesada en las lecturas contradictorias, en el análisis de los indicadores de profundidad, en las perspectivas lineales o, según formulación de Josef Albers, «el origen del arte: la discrepancia entre el hecho físico y el efecto psíquico».
Cabe destacar también, que esta escuela fue la que plantea una nueva forma de ver el arte como un elemento total, la serialidad, la percepción y la relación entre la artesanía y la producción mecánica, por medio de su propuesta de estudio de la geometría descriptiva según el método dinámico, a través de la generación de la forma por el movimiento para reactivar el sentido geométrico.
Sus obras se caracterizan por el estudio de la interrelación de formas y colores, la aplicación de progresiones de colores en matices finos combinados con estructura geométricas y el interés por la percepción de estas. Las características de las primeras obras son las formas exactas sobre fondo oscuro y casi siempre basadas en ilusiones ópticas. Continuamente busca nuevas técnicas para poder dar forma a mis idea.